Tal vez sea por que realmente me afectó , o solo sea el simple hecho de que frente a mi ventana se efectúa la despedida post mortem , no lo sé, el asunto es que don Beto murió y me dio el pretexto perfecto para escribir, cosa que venía buscando desde hace algunos días (el escribir y no su muerte, claro debe estar)
Si fue la diabetes o su triste soledad la causa de su óbito, no tiene importancia, ahora es solo un recuerdo, es solo un cuerpo inerte que atrapa a ojos curiosos, ojos temerosos que lo observan con miedo disfrazado de respeto, ojos que contemplan su propio futuro inminente. Se entonan cantos y albanzas repetitivas buscando entrar en transe, curioso rito que no tengo claro a quien va dirigido.
La muerte, bello acontecimiento cotidiano, tan normal como temido. Miedo tan profundo que es padre de toda religión; cielo, infierno, reencarnación, sheol, hades, jardín de Alá, samsara , purgatorio, aaru etc. todos son la base de sus respectivas religiones. La vida después de la muerte es la obsesión mas grande del animal más engreído q existe sobre la faz de la tierra, en ella quiere convencerse de la justicia ,inexistente, de la vida, busca el sentido de su existir. Tan patética como egoísta, como toda obsesión.
Respetar a la muerte es, hasta cierto punto, algo natural, ningún animal es indolente ante la muerte de un similar. Estúpida humanidad! capaz de ignorar a la naturaleza, seres grises capaces de depredarse a si mismos sin sensibilidad aparente. Encabezados,titulares, portadas grotescas llenan día a día la realidad que mis ojos se niegan a contemplar. Cosa estúpida es obsesionarse con la muerte, pero insensibilizarse ante la muerte de tu propia especie es aberrante, es antinatural.
Por que... entristecerse ante la muerte de un escarabajo pisado por un elefante es algo sin sentido ó ¿Que pasaría si el león se sintiera mal por cazar a un antílope? .Lamentar la muerte de animales que no son de la misma especie, o sin vinculo afectivo, es algo, hasta cierto punto, absurdo. Pero permanecer impasible ante las monstruosas imágenes del cotidiano descaro periodístico, es una idea que me provoca repulsión.
¡A si! olvidaba que esto era sobre la muerte de don Beto xD
En realidad no lo conocí, lo llegué a ver cuando ya yo solo era un susurro para él, debido a la ceguera ocasionada por su ya mencionada enfermedad, por las mañanas tomando el sol, tratando de calentar esa sangre que se había enfriado por la falta de calor humano en su solitario apartamento, con los ojos apuntando hacia al suelo como aquél que sobrevive en una batalla por la cual no quiere luchar.
Ojalá y antes de que su cuerpo dejara de funcionar hubiera sido consiente de que no dejaría de existir, por lo menos puedo asegurar que hasta que yo muera no lo hará, por que por alguna extraña razón siempre tendré el recuerdo vivo de su ser.
D : D
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